Presentación

Presentación

martes, 17 de diciembre de 2019

Jezebel

Jezebel camina lento
para mirar lentamente
lo que pasa en el momento
en que su paso potente
para el ojo suculento
de su admirador caliente. 

Camina y va caminando,
finge saber que no sabe
que todos la están deseando
como una enfermedad grave. 
Los deseos pasan volando
seduciendo hasta a las aves. 

Con un vestido floreado
se viste de savia y néctar
empapada de pecado.
Los tejidos se calientan,
río de flores desbordado,
y los deseos se alimentan. 

Fluye el calor y la sangre
de los miles que la miran,
nace en sus brazos un hambre
que sacian cuando suspiran,
dejando que se desangren
labios muertos que deliran. 

Dicen que una vez un fuego
se encendió en su corazón,
hizo un incendio en su pecho
y su perfume estalló.
Todos los hombres del pueblo
ardieron en seducción. 

Dicen también que los días
en noche se convirtieron 
y las miradas lascivas
ya nunca jamás se fueron;
palpitantes sangres vivas
en fuego se consumieron. 

Le llamaron hechicera,
descendiente de un efrit.
Hizo que el pueblo quisiera
darle su vida y morir.
Todo el que la conociera
se condenaba a sufrir. 

Sigue pasando serena,
llenando el aire de aliento
de una rosa que envenena
como manzana de cuento.
Jezebel no es alguien buena
aunque su camino es cruento. 

Todos caminan a un lado
de la belleza del pueblo,
se sienten enamorados,
mas se pierden en lo eterno
de su cuerpo acompasado
con las llamas de su fuego. 

Glauco

No hay comentarios:

Publicar un comentario