Presentación

Presentación

lunes, 31 de octubre de 2022

Hay que celebrar la muerte

 
Hay que celebrar la muerte
porque uno más ha alcanzado
ya no ser más lastimado
por el mundo que se vierte
y los papeles se invierten. 
Según el dicho del griego,
después de encender el fuego,
se alcanza la libertad,
la verdad, la eternidad.
La vida nunca es un juego.

La muerte, quizá, tal vez
es un juego del destino
contra el azar. Vaticino
que la vida es lo que es
y la muerte es su después.
Ni el destino, ni el azar,
podrán saber qué es ganar
porque fortuna y destino
son visiones del camino
que algún día habrá de acabar. 

Glauco

viernes, 28 de octubre de 2022

Las borracheras

 
Les preguntamos qué tienen,
ellas nos dicen que nada.
Nos entierran su estocada
como una canción que viene
de José Alfredo Jiménez.
A veces su amor es miel
y otras tantas sabe a hiel.
Nuestra única solución
es poner una canción
del mítico Juan Gabriel.

Entre cantos y cantares
el llanto se pone recio
y hasta el borracho más necio
pide que pongan a mares
los Cadetes de Linares. 
Las canciones de soporte
son de los Tigres del Norte,
de Chente y José José
y son cantadas con fe,
como quien sigue un deporte. 

También se oyen los Caifanes,
AC/DC, Journey y Queen,
de todos modos al fin
y al cabo en esos desmanes
caben hasta los Rabanes. 
La maldita primavera,
La ruana y La guarapera. 
En verdad es verdadero
que en el radio un cochinero
durante la borrachera. 

Glauco


jueves, 27 de octubre de 2022

La confusión

 
Alguna vez el cuento fue verdad
y Eva le ofreció del fruto a Adán. 
Alguna vez el fruto se hizo cuento
y nunca más volvió a ser alimento. 

Alguna vez fue cierto el vaticinio
que al griego le condujo el raciocinio. 
Alguna vez el vate se hizo mito
llevando la ignorancia al infinito. 

Alguna vez fue cierta la existencia
hecha de res pensable y res extensa.
Alguna vez saberse fue mentira,

fue errada la sentencia de Descartes.
Lo cierto y la mentira son dos partes
de lo confuso y de lo que se inspira. 

Glauco

miércoles, 26 de octubre de 2022

Enseñanza-aprendizaje

 
Sé bien que lo que se aprende
no es un saber instantáneo,
es explosión en el cráneo,
es palabra que se enciende 
y orgullo que no pretende. 
Sé bien que lo que se enseña
no pertenece a alma dueña,
pertenece al universo
en el lenguaje disperso,
entre el símbolo y la seña. 

Glauco

martes, 25 de octubre de 2022

Me gusta usted

 
Usted, que tantas veces me ha tocado
con la ardiente fortuna de la herida,
me gusta más que el sueño y que la vida,
me gusta más que el cielo coloreado

de rojo y rosa, azul, morado y blanco.
Es porque usted inventa los colores
en el espectro de nuestros amores.
Me gusta porque es cielo y es barranco. 

En serio, usted me gusta, no lo olvide. 
Me gusta para desatar los besos
aprisionados en sus labios gruesos,
para tomarla apenas se descuide. 

Perdóneme, pero es que usted me gusta.
No puedo contener lo que me nace
nomás de verla. El pecho se deshace
y, a veces, que me guste tanto asusta. 

Le juro por los dioses que la miro
y se vuelve de usted mi juramento.
Le juro que no olvido aquel momento
que de su fuente derramé un suspiro

y en él hallé cómo saciar mi sed
de amor, de cuerpo, heridas y dulzura. 
La miro y mi consciencia está segura
que el mundo es bueno, que me gusta usted. 

Glauco

lunes, 24 de octubre de 2022

El eco de la poesía

 
Habrá una vez que el verso clandestino
destino sea para la voz callada,
hallada entre el silencio germinada,
minada por las voces del destino. 

Cuando por fin la voz halle el sonido
nido tendrá en los bellos corazones,
razones puras y sin ambiciones,
visiones en total de lo que ha oído. 

El eco compondrá en los universos
versos para la misma melodía. 
Día del silencio podrá ser el día

en que silencio y ruido sean inversos. 
Versos universales en la vida
ida entre madrigales y casidas. 

Glauco

viernes, 21 de octubre de 2022

Joan Manuel Serrat

 
Oyendo su voz de miel
el canto se hace alimento.
El silencio se hace viento
que sopla el silbido aquel
del canto de Joan Manuel. 
Me ha acompañado en la edad,
el amor y la verdad.
De él abono lo que escribo.
Mi canto es un canto vivo,
pero no es el de Serrat. 

Glauco

jueves, 20 de octubre de 2022

No sé por qué te esperas para hablarme

 
No sé por qué te esperas para hablarme
si te conozco y sé que siempre quieres
hablar de mí, conmigo, y aliviarme
la herida del silencio que me hiere. 

Quizá sigues buscando en el silencio
la forma de decirme sin herirme
tu amor, tu enojo, tu alba y tu comienzo,
y con tu amor arrullarme y dormirme. 

No sé por qué para hablarme te esperas,
no sé y quiero saber quiero entenderte. 
Quiero que siempre me ames y me quieras
y nunca, nunca, me dejes sin verte. 

Buscando en el silencio quizá sigues
y tal vez seguirás con lo que buscas. 
Te miro y sé que vivo porque vives,
mas tu silencio, a veces, me asusta. 

Glauco

miércoles, 19 de octubre de 2022

Te miro allí sentada

 
Te miro allí sentada, pacífica y contenta,
sin nada de violenta y toda enamorada.
En tu dulce mirada se ve que estás atenta
al sol que te calienta mientras estás sentada. 

Con nuestra niña en brazos pareces el vigía
de un faro que hace día la noche de tus pasos.
De besos y de abrazos, de sueños y alegría,
se viste tu valía con nuestra niña en brazos. 

Te miro y siempre miro amor enamorado 
de todo lo mirado, del viento y del respiro.
Tu vida ha dado un giro a todo lo mirado.
Estoy enamorado. Te miro y siempre miro. 

Con nuestra niña llena de sueños y esperanza
se inclina la balanza a la vida serena.
En tu mirada buena se mira la alabanza
que canta la esperanza con nuestra niña llena. 

Glauco

martes, 18 de octubre de 2022

Mi herida

 
No me viene la herida de tu espada
ni tampoco me viene de tu lanza.
De tu escudo me viene la estocada
cual si fuera defensa la venganza. 
Esa herida inocente y despiadada 
me desangra de a poco la esperanza.
Tu defensa me enseña que la vida
vive dentro de la constante herida. 

No me viene la herida en las palabras
ni tampoco me viene de los gritos. 
Del silencio que con desprecio labras
es que viene la herida, ese infinito. 
Esa herida pacífica y macabra
me desangra la bendición del rito.
Tu silencio me enseña que la vida
de quien habla será constante herida. 

No me viene la herida de tu ausencia
ni tampoco me viene de tu olvido. 
Del hechizo maldito de inconsciencia
se me viene el estar, por siempre, herido. 
Esa herida palpita en mi presencia
y me vuelve energúmeno dormido.
Tú no causas la sangre de mi herida. 
Tú me has dado belleza en esta vida. 

Glauco

lunes, 17 de octubre de 2022

Canción de cuna para Violeta

 
Duerme. Duerme. Duerme.
Duérmete que nadie
puede despojarte
del sueño que te viene desde allá,
desde el cielo azul,
del sueño que te cuida tu mamá
y que sueñas tú. 

Duérmete que el mundo
sigue allá girando,
mientras tú no sabes de maldad
ni del sueño cruel.
Mientras te miramos descansar,
nena duérmete. 
Duerme. Duerme. Duerme. 

Qué yo cuidaré tu sueño.
Qué mama te cuida el sueño. 
Qué tu sueño es nuestro sueño. 
Qué lloro si tú no duermes
y mama busca consuelo…

Duerme. Duerme. Duerme. 
Duérmete que nadie
pueda despojarte
del sueño que te cuida tu mamá
y sale del corazón,
del sueño que parece transformar
el sentido amor. 

Glauco

viernes, 14 de octubre de 2022

Tus ojos y tu cadera

 
Todo. Todo, todo quieto
y de pronto el movimiento
rompe el esquema completo
trayendo un cambio violento. 

Ritmo que calienta el cuerpo
y que deforma el ambiente.
Ritmo que detiene el tiempo
vuelto una danza caliente. 

Estatuas de fuegos rojos
me visten de primavera,
es que me siguen tus ojos,
tus ojos y tu cadera. 

Las tristezas son despojos
consumidos en la hoguera,
esa hoguera de tus ojos,
tus ojos y tu cadera. 

En el esquema completo,
ese del cambio violento,
no sé lo que es estar quieto.
Todo. Todo, movimiento. 

Glauco

jueves, 13 de octubre de 2022

El milagro maternal

 
Dicen que quien cuervos cría
amanece sin mirar,
mas mi madre no sabía
de esta sentencia juglar. 
Como no la conocía
no tuvo miedo de amar
al cuervo con quien comía
y de enseñarlo a volar. 

Los cuervos no sacan nada,
tienen hambre solamente.
No es que busquen la mirada 
de ternura de la gente
para su hambre desquiciada,
buscan un plato indulgente
que les cure la tajada
de su nacimiento hiriente. 

No todo cuervo es malvado
ni sucumbe al irascible
desdén del mundo encontrado. 
Pasa a veces lo increíble
y el cuervo beneficiado
por una madre impasible
es en cisne transformado.
El milagro sí es posible. 

Glauco

miércoles, 12 de octubre de 2022

Los diarios de los muertos

 
¿Qué recordarán los muertos
de aquellos a los que amaron? 
Si cuando ellos se murieron
sus memorias acabaron. 

El árbol muere con ellos
y con ellos muere el sol,
en los vivos su recuerdo
vive en un trago de alcohol. 

Algunos vivos avivan
con lágrimas la memoria,
algunos vivos caminan
los apuntes de la historia. 

Y aunque tantos hombres vivos
tienen móviles recuerdos,
hay más recuerdos perdidos
en los diarios de los muertos. 

Glauco

martes, 11 de octubre de 2022

Sonetillo del consuelo

 
Hazle a mi llanto una casa,
no grande, sí acogedora,
que haga sentir a quien llora
que la pena siempre pasa. 

Hazle a mi llanto un camino,
no largo, si disfrutable,
un camino que me hable
de que acaba el desatino. 

Hazle a mi llanto una fuente
de donde pueda beber
y bañarse en tu querer.

Hazle a mi llanto un latente
cariño que vaya al cielo
y le llene de consuelo. 

Glauco

lunes, 10 de octubre de 2022

De tu lascivia

 
Me he sentado a esperar que tus pestañas
abaniquen en mí sueños y hervores,
pa' que de lado a lado y sin errores
me muestre tu mirada que me extrañas. 

Me he sentado a esperar que la maraña
de tu pelo se convierta en sol y flores
pa' llenarme en tu brillo y tus olores,
mientras mi despiadada hombría te daña. 

Y aquí sigo sentado y esperando
que en el otoño encuentres el verano
y encuentres mis caricias en tu mano. 

Y aunque no sé muy bien cómo ni cuándo,
espero que las hojas del otoño
enciendan el camino del retoño. 

Glauco

viernes, 7 de octubre de 2022

El solitario

 
Lo más profundo del frío
cala más en las ausencias,
en un terreno baldío
de amigos y de experiencias. 

Hace frío en la vieja esquina
que se forma en un recodo
por donde nadie camina
y donde se observa todo. 

Los zapatos elegantes
y los calados vestidos
nos recuerdan que hay un antes
que quedará en el olvido. 

El futuro está presente
en el aquí y el ahora
es un recuerdo viviente
de la esperanza que añora. 

Mas el solo sólo mira,
en el pasado arraigado,
cómo el mundo gira y gira
sobre un eterno pasado. 

Glauco

jueves, 6 de octubre de 2022

Los ojos

 
Ojos que otros ojos miran,
a veces miran lo humano,
algunas otras deliran
y creen mirar lo divino.

Lo divino se hace amor
y lo humano se hace menos.
Lo humano nos causa horror
y lo otro nos hace buenos. 

La creación de la ternura,
del celo la destrucción;
el celo es mirada impura,
la ternura es corazón. 

El corazón que palpita
se viste de parpadeo.
La mirada necesita 
apoteósico apogeo. 

Apuesto que en mi mirada
otros han visto dolor.
Realmente el dolor no es nada
si no nace del amor. 

Una vez que el amor nace
se envuelve de fuegos rojos,
se hace, se hace y se rehace
cuando se miran los ojos. 

Glauco

miércoles, 5 de octubre de 2022

Arde tu amor

 
Me arde tu amor, mas no arde como herida.
Es sol, es primavera y es abrazo,
es vida que palpita en tu regazo,
es llama que entre tus labios se anida. 

Forja entre mis pestañas la ternura
y derrite la ira, la hace llanto,
con aliento y mirada se hace manto
tejido entre este mundo y su denzura. 

Me cala vello y piel, me hace felino.
La bruta sensación de tu mirada
me hace fogata inmensa, iluminada.

La llama mística del adivino
es tu cariño, pozo del calor.
No arde una herida, mas me arde tu amor. 

Glauco

martes, 4 de octubre de 2022

Allá donde tú estás vive mi pensamiento

 

Allá por donde vuela libre el viento,

ese lugar en donde el sol no muere,

allá donde la guerra nunca hiere,

allende paz y sol soplan su aliento; 


allá hay un corazón que late y quiere

que viva eternamente aquel momento

en que el amor dejó de ser un cuento

para ser realidad que se refiere.


Allá donde se vuelve cierto el mito,

allá donde el amor es más que un rito,

allá donde se abrasa el sentimiento; 


allá donde a tus besos me requieres,

dónde eres tú entre todas las mujeres,

está mi amor, mi fe y mi pensamiento. 


Glauco

lunes, 3 de octubre de 2022

Las preguntas

 
¿Cuántos corazones se habrán roto
al escuchar la negación tajante
de su deseo de hacerse con el otro
huella, paso, camino y caminante? 

¿Cuántos silencios se habrán olvidado
detrás de la risa que esconde el llanto
y los congela, los deja de lado
sin faz de maldición ni alma de encanto? 

¿Cuántos sentimientos de vergüenza
habrán germinado tras el rechazo
de aquellos que somos y de la inmensa
muerte moral que damos al fracaso? 

¿Cuántas memorias se hallan escondidas
en plantas, calendarios y roperos
mientras la gente las da por perdidas
y tapa con ficción los agujeros? 

¿Cuántos besos se habrán desencantado
en el fuego perenne de otros besos
y al besarse saberse desechados
entre olvidos, anhelos y embelesos?

¿Cuántas sendas se habrán arrepentido
de forjarse a la sombra de las huellas
donde todo destino está dormido
y no llega jamás a las estrellas? 

¿Cuántas lluvias de lluvia habrán llenado
los jarrones, los cántaros y vasos,
cual si fueran tormentas del pasado
que escurren entre besos y entre abrazos? 

¿Cuántos llantos habrán de ser señal
de que el mundo se encuentra en lo profundo
de un abismo, que roza su final
y pronto dejará de ser el mundo? 

¿Cuántas frases habrán de silenciarse
en el vicio de besos y caricias
que consume a los ávidos de amarse
convirtiendo su amor en injusticia? 

¿Cuántas dudas habrán de germinar
en preguntas benéficas y honestas,
que conviertan el don de preguntar
en el don de llegar a las respuestas? 

Glauco