Cada vez que te apareces
remueves todo en mi ser.
Aunque no te puedo ver,
puedo sentir cómo creces
y poco a poco me escueces.
Te calmo violentamente
con cinco espadas valientes
que estocan tu aparición,
malnacida comezón.
No te vas pero me mientes.
Glauco
No hay comentarios:
Publicar un comentario