Y si acaso tu mirada no vieras
pero vieras mi mirada en el viento,
en la voz, en el febril sentimiento,
de esa fiebre no muriera y murieras.
Y si acaso en mi mirar descubrieras
que te amo, y porque te amo lamento
que tu enojo vuelva a tu ojo violento,
de mis ojos mil caricias sintieras.
Y si acaso me miraras sabrías
que es mi pecho blanco de tu estocada,
esa herida es vida resucitada
transformando penas en alegrías.
Y si acaso aún estás enfadada
no te olvides de mirar mi mirada.
Glauco
No hay comentarios:
Publicar un comentario