Igual que un panorama nunca visto
me veo cuando te miro y no me miras.
No arranco de tu boca voz en tiras,
pero al silencio nuestro me resisto.
Resístome a ser tromba de ojos verdes.
Resístome a ser trueno de sonrisas.
A penas a lo lejos te divisas,
toda la resistencia en mí se pierde.
Se pierde mi mirada tras la tuya.
Dispara perdigones la granada
que une razones con corazonadas.
Puedo ser un paisaje que patrulla
buscando hacerle guardia a tu mirada;
hacerte amor y mímesis hablada.
Glauco
No hay comentarios:
Publicar un comentario