por doquiera: entre las grietas
del alma de los poetas,
en el eje del carrete
que le da la vuelta al mundo;
en el instante fecundo
del perdón, en el pequeño
reloj que despierta al sueño.
Se mete el sol simplemente
en las grietas, por doquiera
que recita el alma entera
en el eje de la mente;
es un mundo en novedad,
henchido de la verdad,
de la vida y la pasión;
es la luz del corazón.
Glauco
No hay comentarios:
Publicar un comentario