Tres cartas de amor y un tono desesperado

Carta I

A mi mejor amigo, A

Andas ausente, amigo. 
Azúl te arrastras. Hasta allá has anidado, ansioso de amar. Afligido, adorable, atractivo, hambriento, asombroso, amanecer áureo, ambicioso, atrevido, apreciado amigo.

Amargas avenidas han ahogado tu andar, aquí, allá, andas ausente.
Aquella a la que amas, ¿adora tus amarillas alas?, ¿aprecia aquellos amaneceres?

... anda, amala Anonadada alma.

¡Amargo amanecer! Aquí andan ahogándome, abrazándome, amarrandome aquellas animas; arrastran arrepentimiento, ansia, hambre, arañas. 

Aquí asustada me hallaste,y hacías arder las angustias, alegre andabas,

alegre me armabas aros astrales, me alumbrabas. Alardeo agradecida: Aquietaste mi andrajosa alma ¡Amado amigo! Atestigüé atónita tu astucia,

 ángel acre arañaste mis arterias...ahora, asustada ando.

Arrojado y amable amas, amas a aquella, al anhelo. 

Amas por amar, aunque, ¿aquella te ama? 

Ambiciono la alegría tuya... arriesgarme a aniquilarte la amargura. Afable aparición, ahórrate angustias, apariencias amables abundan. 

Harto ataviado andas en asquerosas aldeas, apesta su habitualidad. 

¡Anda, aletea, alzate argénteo hasta alturas armoniosas y amenas! 

¡Tú, arcoiris de abalorio!

Allende, halagas a aquella a la que amas, amarrados ahogándose en alfaguaras. Aferrado, asustado, anhelando, amas. Abyección apática.

Acróbata apesadumbrado, han alquitranado tu abrasador aroma. 

Aura abatida, aún aplaudes, aún ausente apreciarás mi amargo abrigo.
Arroja la armadura, acurrúcate aquí.
Abstracta aurora, andas arrinconado en la ambigüedad sin acordarte que antaño Alguien aquí te ama...