¡Gracias!

¡Oh, maravilloso cielo,

gracias por dejar al sol

vivir donde puedo verlo,

donde no mata el calor!

¡Gracias por darle a la luna

un momento de brillar,

de acompañar en su tuna

al romántico juglar! 

¡Gracias por el horizonte

y gracias por el cenit,

por cubrir de sur a norte

nuestro sitio de dormir! 

¡Oh, maravillosa tierra,

gracias por darnos lugar

entre el desierto y la selva

para sonreír y amar!

¡Gracias por mecer el mar

para que no llore y duerma

y no nos quiera matar,

sino darnos vida nueva! 

¡Gracias por hacer el mundo,

y por hacer el planeta

dónde de uno por uno

te llenas, estás repleta! 

¡Oh, maravilloso tiempo,

gracias por pasar veloz

y algunas veces más lento

sobre este mundo precoz!

¡Gracias por la rapidez

que incita a querer más vida,

también por tu languidez

que aletarga la salida! 

¡Gracias por el calendario,

desde diciembre hasta enero

y gracias por el horario,

por marcarnos el sendero! 

¡Oh, señor maravilloso,

gracias por haber soplado

vida bajo nuestros ojos

y sobre nuestro bocado! 

¡Gracias por nuestro dolor,

reflejo de tu justicia,

que nos inunda de amor

y nos quita la inmundicia!

¡Gracias por ir a la nada

para sacarnos de ahí,

por brindarnos tu mirada

y enamorarnos de ti! 

Glauco