Aún no sé cómo vine a encontrarte
en este vasto mundo.
Caminaba, sí, pero no andaba
descubriendo algún rumbo.
Sólo iba y cuando iba
bien sabía que volvería,
o al menos eso creía,
porque ahora
verdaderamente sé
que no quería volver,
que no quería morirme sin saber
lo que es verdadera esperanza.
Te encontré y así sin más
se me encendió la alegría.
Cada símbolo es sonrisa
por tu causa,
porque te pienso y te siento
como si hubiera nacido para reconocer
que existes en esta tierra.
Aún no daba contigo
y pensé en haber sabido
que no había más que buscar,
pero llegaste,
te paraste frente a mí,
me hablaste,
no me besaste,
me viste, me acariciaste
y te fuiste.
Hoy camino tras de ti.
Quiero saber de ti.
Quiero escucharte a ti.
Quiero saber lo que es nacer
hoy, aquí,
en este tiempo nuevo
donde ya nada
parece hacer falta.
Quiero saber de ti mil veces
y mil veces verte aunque nunca me beses.
Quiero saber de ti porque me gustas,
porque prefiero creer que caminaba
para por fin encontrarte,
a creer que no hay algo de magia
envolviéndote.
Tú me gustas
y te estoy buscando.
Glauco
No hay comentarios:
Publicar un comentario