Básicamente
son muy pocas las letras
que dicen algo.
Son las orejas
las que dicen que dicen
lo que escuchamos.
Ellas no fingen,
nosotros sí, decimos,
no pronunciamos.
Letra y sonido
le ocultan al que sabe
su propio engaño.
¡Ay, del que hable
creyendo que su saber
le vale algo!
Glauco
No hay comentarios:
Publicar un comentario