a las dos de la mañana.
Hay una angustia bacana
que se traduce en calor
cuando por la madrugada
nos hace falta el amor.
La decencia está encerrada
en la celda de un farol;
por la imitación del sol.
en el suelo dibujada
Es más potente el alcohol
a las dos de la mañana.
Cubiertos del corazón,
en la vaina de la espada,
sin rosario y sin campana,
sin armonía ni canción…
Tomándonos para el alma
cariñitos de licor.
Glauco
No hay comentarios:
Publicar un comentario